Mostrando entradas con la etiqueta Cines de Barrio. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cines de Barrio. Mostrar todas las entradas

domingo, 2 de agosto de 2015

BALCONY

Hay fumadores que logran un estallido único de sensualidad en el juego que establecen entre sus dedos, el cigarro, el encendedor y los claroscuros del rostro. Luego una sensación de intimidad te abraza. Aunque nunca he fumado, la primera vez que  descubrí ese efecto fue en el cine Ritz de Luyanó en compañía de tres amigos del barrio. Esa noche el líder del grupo era Iván, mayor que los demás. Ya se afeitaba, usaba colonia de adultos y consumía Populares sin filtro. Estábamos en séptimo y octavo grado y salíamos a caminar o sentarnos en las esquinas, a perder el tiempo, o juntarnos con otros muchachos. Los años han desdibujado su cara y no logro un retrato convincente; solo recuerdo la impresión que me produjo una palabra suya. Él fue quien sugirió subir al balcony del Ritz que siempre estaba vacío. A la acomodadora no le importaba lo que sucedía allí. Nos sentíamos libres. En el instante en que en la pantalla un montón de cuchillos entraban en la carne de un emperador romano,  Iván puso un cigarro en mis labios y dijo con tierna masculinidad: Pruébalo.

viernes, 17 de julio de 2009

COSTUMBRES URBANAS EN EXTINCION: CINES DE BARRIO.


Por: Lázaro Sarmiento

A veces imagino que los ejecutivos que administran los cines de barrio que quedan en La Habana le tienen muy poco amor al cine. Pero…solo son malos pensamientos.

Hoy pasé frente a El Mégano, antiguo Capri. Cerrado. Estuvo abierto hasta hace unos días. Un empleado que cuida la instalación ubicada a varios pasos de una de las esquinas del Capitolio Nacional dice que hay otros planes para este cine. Una tercera persona que escuchaba la conversación acota que El Mégano lo cerraron debido al público que acudía a las funciones.

Creo que argumentos como la actitud del público en la platea, o el reducido número de espectadores, o la falta de recursos, constituyen en muchos casos pretextos que encubren indolencia, desinterés y falta de imaginación en algunos funcionarios para mantener una programación que contribuya a la recreación y animación cultural del barrio.

Estos locales no pertenecen al Instituto de Arte e Industria Cinematográficos, ICAIC. Desde 1976 los cines de barrio los controla una entidad a nivel provincial.

Una inteligente selección de películas y la combinación de proyecciones de filmes con espectáculos de variedades, junto a la limpieza y la caracterización adecuadas de las salas, pudieran salvar los pocos cines de barrio que quedan en La Habana. Algunos con más méritos que otros. Por ejemplo, se decía que el Actualidades era el cine más antiguo de América Latina en mantener de forma continua la proyección de filmes.Casi un museo de costumbres urbanas.

La experiencia demuestra que cada vez que se cierra uno de estos locales difícilmente vuelva a abrirse. Así sucedió con el Actualidades, Pionero, Apolo, Rex, Duplex, Moderno, Atlas, Martha, Luyanó, Negrete, Cuatro Caminos (¿alguien se acuerda?) Bayamo, Nuevo Continental, Reina, Universal, Finlay y...la lista es numerosa y junto a los del barrio aparecen también cines que eran de “estreno”. Ahora pudiera añadirse El Megano, en Industria esquina a San José. THE END






jueves, 15 de enero de 2009

Un cine de barrio y los misterios del Casino Chino. 区戏院和中国赌博娱乐场的奥秘。
Por: Lázaro Sarmiento

El Continental es un antiguo cine del Barrio Chino de La Habana. Ubicado en la calle Manrique, esta catalogado en la actualidad como “Obra en estudio” por la Oficina del Historiador de la Ciudad Esto quiere decir que el inmueble recuperará su esplendor y se convertirá en una instalación útil a la población

La búsqueda de referencias sobre El Continental me llevó a la historia de las luchas políticas y cambios sociales de la ciudad china de La Habana. Este cine fue intervenido el 13 de octubre de 1960. Ese día el Departamento de Recuperación de Bienes Malversados del Ministerio de Hacienda dispuso también la intervención de varias empresas, almacenes y otras propiedades pertenecientes al Casino Chung Wah y a sus ejecutivos Joaquín Lee, Ramón Chiang e Ignacio Lima, para aclarar sus posibles responsabilidades con el derrocado gobierno de Batista.


Tres días antes de la intervención del cine Continental, las corrientes contrarias a la Revolución Cubana habían perdido el control del influyente Casino Chung Wah. Los investigadores Miriam Herrera y Mario Castillo en el libro De la memoria a la vida pública señalan:“El 10 de octubre de 1960, en el marco del acto de conmemoración del aniversario 49 de la proclamación de la República China de 1911, el Casino Chung Wash, máxima institución de la comunidad china de Cuba, sería escenario de un nuevo ejemplo de los conflictos políticos y de clases dentro de la comunidad china de La Habana. Los temas que polarizarían el debate en ese momento serían las nuevas proyecciones ideológicas del gobierno revolucionario, expresadas por Fidel Castro en la Primera Declaración de La Habana. Como derivación de esto, el asunto de los manejos oscuros respecto a los bienes y fondos del Casino Chung Wah saldrían a relucir”.

Algunos de los directivos del Casino rechazaban la decisión de Cuba de establecer relaciones con la República Popular China, formulaban ataques contra la Revolución y se empecinaban en mantener en el local la fotografía de Chiang Kai Shek.

De los 7 nuevos miembros de la dirigencia del Casino Chung Wah elegida en octubre de 1960, tres eran militantes comunistas: Manuel Luis, Luis Li y Francisco Lam. Uno de ellos, Manuel Luis, había sido fundador de la Alianza en Defensa de la Cultura China, de filiación comunista, que devino luego de 1959 en Alianza Nueva Democracia China en Cuba. Esta organización creó la brigada de milicia José Wong para apoyar a la Revolución. José Wong fue un militante comunista chino asesinado por la policía de Machado en 1930.

Pero estábamos en el cine…

Herrera Jerez, Miriam, Mario Castillo Santana, De la memoria a la vida pública, La Habana, Centro de Investigación y Desarrollo de la Cultura Cubana Juan Marinello, 2003.
Imágenes: Derecha: Fachada del cine Continental. Calle Manrique .Izquierda: Cuchillo de Zanja. Barrio Chino de La Habana. Fotos: Lázaro 14.01.09

lunes, 22 de diciembre de 2008


Cines de medianoche
Por: Lázaro Sarmiento

Hasta hace pocos años, los cines Payret y Yara de La Habana ofrecieron funciones a las doce de la noche. Fueron los s últimos. Las proyecciones en este horario se habían iniciado de forma regular en la capital cubana en el cine Cuatro Caminos en los inicios de la década de 1940.

Hubo una época en que la presentación de películas en la medianoche solo estaba relacionada con temas “escabrosos”, según el término empleado por los censores de los años treinta, o de nudismo y evidente contenido sexual.

Como los viejos cines de barrio constituyen uno de los temas de este blog, me resultan muy valiosos los datos divulgados en el libro La tienda negra. El cine en Cuba (1897-1990). Su autora María Eulalia Douglas incluye la siguiente referencia correspondiente a noviembre de 1939:

“Por primera vez la Comisión Revisora de Películas aprueba la exhibición, en tandas regulares, de un filme con tema calificado de “escabroso”. Se trata del filme argentino Tributos sexuales, sobre enfermedades venéreas, clasificado como científico-didáctico.


“Se autorizó para mayores de 15 años y se exhibió en los cines Florencia y Favorito. Este tipo de filmes y otros con el tema del nudismo solían exhibirse muy esporádicamente en tandas especiales a las doce de la noche…”


En 1940 el cine Cuatro Caminos se convirtió en el primero de La Habana en ofrecer tandas regulares de medianoche .El espectáculo, de doce a tres de la madrugada, incluía dos películas, noticieros y dibujos animados.

el 31 de diciembre de 1944 los cines Fausto, Alcázar (después Teatro Musical de La Habana) ,Nacional (hoy Gran Teatro), Payret y Campoamor, entre otros, ofrecieron una función extraordinaria a las doce de la medianoche para recibir el año nuevo . La costumbre se extendió en las décadas sucesivas.



Pero todo esto me parece historia antigua.
Ahora la televisión con musicales enlatados y películas de moda ha sustituido a los viejos cines en la última noche del año.


Imágenes:
Derecha Cine teatro Fausto, en Prado, La Habana. Una de las mejores muestras del art deco habanero.
Arriba: Cine Favorito, en Belascoaín, Centro Habana. En la actualidad sede de la compañía de danza de Narciso Medina. Fotos: Lázaro

viernes, 19 de diciembre de 2008


Cines en peligro de extinción
Por: Lázaro Sarmiento

Hay que incluir rápidamente a los cines antiguos que van quedando en el mundo en la Lista Roja del Patrimonio Material de la Nostalgia, como hacen los ecologistas con los rinocerontes, los delfines rosados y los damaliscos de frente blanca. La Habana no escapa de esa geografía urbana de la decadencia. Pero lo más alarmante es que no se trata solo de los más humildes locales entre los viejos cines de barrio. Ya han desaparecido, o van camino de ello, varias salas importantes como Los Ángeles, en Santos Suárez, y el Apolo, en Luyanó.




Esta tarde pasé frente al que fuera popular y alguna vez bien climatizado cine Actualidades (Monserrate, entre Neptuno y Virtudes, Centro Habana). Hace meses que permanece cerrado.

El Actualidades fue inaugurado el 18 de abril de 1906. Desde entonces se había mantenido ininterrumpidamente ofreciendo películas con las excepciones de las temporadas dedicadas a variedades musicales (de 1926 a 1931) y luego cuando fue reconstruido y reinaugurado en 1939.

El Actualidades con su larga historia en la pantalla y en los asientos puede correr la misma suerte que otros viejos cines habaneros como el Astor, el Universal, el Moderno, el Verdún, el Bayamo, el Ideal…

Aún estamos a tiempo de salvar algunos viejos cines.




Imagen: Cines Apolo y Actualidades. Fotógrafo: Lázaro.

lunes, 1 de diciembre de 2008

En la densa oscuridad de la platea.
Por: Lázaro Sarmiento

Se publica en el periódico El Mundo un comentario sobre las cartas enviadas al alcalde de La Habana, Varona Suárez, solicitando se sitúe un inspector en le cine Campoamor, en cuyo local se dice que “se vulnera los principios de la moral pública” aprovechando la densa oscuridad durante las funciones cinematográficas, lo cual ofende a las familias respetables que acuden a dicha funciones. (23 de Febrero de 1917)

La anterior nota la transcribí del libro La tienda negra. El cine en Cuba (1897-1990) , de María Eulalia Douglas (Cinemateca de Cuba, La Habana, 1996). El cine Campoamor al que se hace referencia en las cartas al alcalde no es el que está (o estuvo) en la esquina de Industria y San José (ahora casi en ruinas), sino uno que había frente al Parque Central, inaugurado en 1915 y demolido en 1925. Por cierto, 28 años después se formula una petición parecida:

Algunas entidades y personas solicitan del alcalde de La Habana se suspendan las tandas de las doce de la noche en los cines, alegando que en tales funciones se producen actos atentatorios a la moral, por el tipo de público asistente. La solicitud no es aceptada. (Mayo de 1945)

lunes, 6 de octubre de 2008


Cines de barrio: el Fénix.
Por: Lázaro Sarmiento

Es probable que muy poca gente recuerde el cine Fénix de la calle Santa Ana 255 en Luyanó. Como yo vivía en mi niñez y adolescencia en este barrio de La Habana, me cuento entre las personas que tienen algún recuerdo vinculado con el cine Fénix.

Una sola planta con 680 butacas de madera. Grandes ventiladores de pie. Las ventanas permanecían abiertas hacia los pasillos laterales. A ambos lados de la pantalla estaba la puerta de los baños con los clásicos letreritos de Damas y Caballeros. En el lunetario te encontrabas con los vecinos de tu edificio o con los alumnos de tu escuela. El Fénix era el modesto cine de barrio, sin ninguna posibilidad de pasado luminoso. Aquí vi El arpa de Birmania, archivada en mi memoria como una película rara, extraña.

Pero lo que me resulta tan extraño como el recuerdo de Birmania es que cuando hace unos días regresé a lo que fue el cine Fénix, descubrí en el piso del portal un dibujo con las iniciales: H y F. Estas iniciales habían pasado inadvertidas para mí en todas las ocasiones ya brumosas en que fui a sus funciones. Nunca tuve noticias de que en los altos del cine hubiera habido alguna vez un hotel o una posada.
A principios de la década de 1990, el cine Fénix pasó a ser albergue provisional para varias familias necesitadas que con el tiempo convirtieron la instalación en su hogar definitivo.

El recuerdo de El Arpa de Birmania y el cadáver del cine Fénix me producen una sensación de tristeza, diría que casi de miedo.

viernes, 26 de septiembre de 2008

FACHADAS DE CINE EN LA HABANA: CINECITO.

Por: Lázaro Sarmiento

El 9 de julio de 1942, el antiguo cine Cinecito (400 butacas), en la calle San Rafael, esquina a Consulado, y con el nombre de Cine Periódico Resumen, comenzó a proyectar cortos, noticieros y dibujos animados .Años más tarde esta sala recobró el nombre de Cinecito con una programación dirigida principalmente al público infantil, función que mantiene en la actualidad.

Desde el 1938, otro cine también en la calle San Rafael, el Rex Cinema, ya ofrecía una programación similar. El Rex Cinema fue la primera sala de Cuba dedicada exclusivamente a la exhibición de filmes documentales, cortometrajes y noticieros.

FACHADAS DE CINE EN LA HABANA: EL MEGANO




Es casi un milagro fílmico que la sala El Mégano, antiguo cine Capri (450 butacas), en Consulado y San José, continúe ofreciendo películas. Dos ventiladores de pie prehistóricos, un proyector ruidoso, un audio de la era de The jazz singer y películas cuyas copias parecen cocidas con hilo, lo convierten en un local museable. El Mégano tiene el mérito de mantenerse funcionando cuando la inmensa mayoría de los cines de barrio de La Habana han desaparecido.


sábado, 20 de septiembre de 2008

Vida de cine en La Habana.
Por: Lázaro Sarmiento

-¿Quieres trabajar en el cine?-

Sin dudarlo, respondió afirmativamente la pregunta del amigo. “A casi todo el mundo le gustan las películas entretenidas y la vida dorada de las estrellas”. A los tres días entraba triunfal como acomodadora en el Astor, un cine de barrio de La Habana. Era el mes de septiembre de 1976. Ese año estrenaron en Cuba Romanza de los enamorados (soviética), La tierra prometida (polaca) y Pobre muchacha (inglesa).

Durante los 32 años que lleva en el cine, ha visto pocas películas porque después de un tiempo muy breve como acomodadora pasó a la taquilla –pagaban un poquito más-. Y en la taquilla veía las manos y las caras de los espectadores pero nunca las imágenes que ellos disfrutaban en la penumbra del lunetario. En ocasiones escuchaba de lejos voces en otros idiomas.

Empezó ganado 100 pesos- en aquella época le alcanzaban - pero en la actualidad los 270 pesos que recibe le parecen menos dinero. En el cine Astor trabajó veinte años hasta que se desplomó una parte del techo frente a la pantalla. Entonces la gente desmontó los ladrillos de las paredes, los marcos de las puertas y todo lo que podían canibalear hasta dejar solo el esqueleto de hierro y las escaleras de cemento . En unas semanas vio desaparecer el escenario donde transcurrieron los mejores años de su vida.

Después del derrumbe, la mandaron para el cine Finlay de la calle Zanja. Allí se mantuvo en la taquilla hasta que las autoridades municipales cerraron esta sala hace un año para entregársela como local de ensayo a una agencia musical. Y ahora cobra la entrada en el Águila de Oro, en el Barrio Chino, uno de los dos únicos cines que permanecen funcionando en Centro Habana .Aquí piensa jubilarse, “a no ser que el local cierre”.


El Águila de Oro tiene un público compuesto casi en su totalidad por hombres amantes de las escenas violentas. Proyectan principalmente cintas de kong fu- aunque también algunas viejas producciones como Helena de Troya- en tres tandas separadas, 2 y 30, 4 y 30 y 6 y 30.

Ella llega muy temprano al Águila de Oro y se va cuando ya está en el aire el Noticiero Nacional de Televisión. Vive sola en la calle Soledad, muy cerca de San Lázaro. No tuvo hijos. Está orgullosa de su vida en el cine (en los cines) y se llama María Josefa Reyes Suárez.

jueves, 18 de septiembre de 2008


Greta Garbo y su amante Mercedes.
Por: Lázaro Sarmiento

Tendría ahora 103 años. Pero de haber estado viva no hubiera quedado ni un átomo de su antiguo glamour. Greta Garbo nació en Estocolmo el 18 de septiembre de 1905 y murió en Nueva York el 15 de abril de 1990.

Se retiró del cine mucho antes de que el tiempo devastara su rostro perfecto. En esta ocasión no voy a referirme al encanto misterioso de Greta Garbo si no a la relación que mantuvo con la escritora de origen cubano Mercedes de Acosta. Fue un acoplamiento corto pero con la pasión suficiente para que el nombre de Mercedes quedara incrustado para siempre en la biografía de uno de los íconos más rotundos del siglo veinte.

En agosto de 2001 El País Semanal en la serie Grandes historias de amor de Hollywood publicó un artículo de Guillermo Cabrera Infante titulado “Greta ama a Mercedes”.Esta Mercedes de Acosta, de familia venida de Cuba, nació en 1893 en Nueva York (otros dicen que en La Habana) y murió en 1968.

Mercedes de Acosta fue poeta, escritora, comentarista de sociedad y guionista de Hollywood. Murió olvidada y en la penuria pero nunca quiso vender las cartas de amor que conservaba de Greta. Sin embargo, no hay que pensar en una Mercedes infeliz toda su vida por un amor no correspondido. Baste esta frase para lo contrario: Alcanzó notoriedad por sus amores con las mujeres más famosas de América. En su lista de amantes figuraron Isadora Duncan y Marlene Dietrich.

Mercedes y Greta se conocieron en el Hollywood de principios de la década de 1930. Contaba Cabrera Infante que Mercedes llamaba a Greta varias veces al día. La divina respondía con evasivas. Pero Mercedes era insistente hasta que…

”Finalmente se acostaron –para desaparecer Greta en un viaje a las montañas y a un lago secreto-.Mercedes, desesperada en Hollwyood, recibió de pronto el reclamo de Greta, mediante su sempiterno chofer mudo que manejaba el automóvil de la estrella, ahora una mujer aquiescente. Pasaron dos semanas de amor junto al lago quieto-pero no fueron felices hasta el fin de sus vidas, sino que murieron como habían vivido: una de ellas sola, la otra abrumada por los recuerdos contados a un diario impúdico, imprudente”.

Y más adelante, Cabrera Infante comentaba que esta historia terminó como siempre terminaron las relaciones de Greta Garbo, tanto heterosexuales como homosexuales:

“Garbo cortó por lo sano y se negó a volver con Mercedes, aunque hubo contactos postales o telefónicos y uno que otro encuentro casual.” The End

La imagen de arriba es un póster que colgaba en la pared de un cine de Bayamo. Había sido recortado previamente con unas tijeras kitsch y el nombre de Greta Garbo pegado en el centro de la lámina.

domingo, 1 de junio de 2008


Cines de barrio en peligro de extinción.
Por: Lázaro Sarmiento

Hay que incluir rápidamente a los pocos cines de barrio que van quedando en el mundo en la Lista Roja del Patrimonio Amenazado de las Ciudades, como hacen los ecologistas con los rinocerontes, los delfines rosados y los damaliscos de frente blanca.

Hace unas horas estuve buscando referencias sobre el tema en Internet.: Reforma, Norma, Encanto, Savoy, Lido, Cosmos…nombres de salas cinematográficas que se repiten en diferentes países. Algunas desaparecieron sepultadas por el hormigón, el acero y los cristales. Se transformaron en multicines, supermercados, almacenes y parqueos. Otras están en ruinas. Y unas pocos aún se mantienen en pie.

Aquí opiniones recogidas en varias blogs.

“En México, al igual que en otros países del mundo, se construyeron grandes salas cinematográficas decoradas de forma exótica (como el Palacio Chino) ostentosa (como el Opera o el Metropolitan) o en un estilo art-deco único (Como el encanto o el Teresa) e incluso hubo cines de estilo barroco-californiano como los creados por Charles Lee (Como el Lindavista). El poco interés por preservar este patrimonio arquitectónico ha hecho que muchos de ellos se hayan destruido para construir estacionamientos, centros comerciales o se han fraccionado en multi-cinemas.” (México)

“No me gusta que los cines inmensos y antiguos de la Gran Vía de Madrid vayan muriendo poco a poco.”(España)

“¿Nostalgia por los viejos cines? si, por que estaban diseñados para eso, para ver cine, no para ir a comer (algunos(as) van a tragar), con pantallas grandísimas, no como ahora que parecen televisiones, con todo aquello de mi niñez.” (México)

“Electric Cinema. Se cree que es la sala de cine más antigua de Gran Bretaña. Es un buen lugar para ver películas comerciales y cinearte después de un paseo por el mercado de Portobello los sábados.191 Portobello Road, Notting Hill, W11. Estación de metro: Ladbroke Grove.” (Reino Unido).

“El Cosmos de seguro será otro templo evangelista, u otro supermercado de Chinitos, y bueno... que le va a hacer, esto pasó en todos los "barrios". Los cines de antes se extrañan pero por algo más que por el cine, había un sentimiento, sino no se explica que te guste mas ir a un cine de los de antes que son incómodos, y que por lo general lo tienen sucio y descuidado.” (Argentina)

El cine Actualidades de La Habana fue inaugurado el 18 de abril de 1906. Desde entonces se ha mantenido ininterrumpidamente ofreciendo películas con las excepciones de las temporadas dedicadas a variedades musicales (de 1926 a 1931) y luego cuando fue reconstruido y reinaugurado en 1939.

Me preocupa que el Actualidades con su larga historia corra la misma suerte que otras antiguas salas como, el Astor, el Universal, el Campoamor, el Moderno, el Verdún, el Bayamo, el Ideal…
Algunos edificios de los viejos cines merecen ser salvados, antes que sea demasiado tarde. Llegará el día en que ojos futuros los observarán como museos.

jueves, 8 de mayo de 2008


FACHADAS DE CINES: Norma
Por: Lázaro Sarmiento
Antiguo cine Norma, Calzada de Luyanó no. 702, La Habana. Inaugurado en 1910, el año del cometa. Fantasma que habita este cine: Francesca Bertini.

-¿Norma Shearer?
No. Cuando este local abrió sus puertas ella era una niña, lejos del estrellato que luego conquistaría en Hollywood.

-¿Acaso Norma Talmadge?
No, no…. Todavía no se había convertido en la actriz más reveladora de la Vitagraph.

-¿Norma, de Bellini?
La ópera de la vieja escuela italiana seguía representándose con éxito en los inicios del siglo veinte.

O tal vez Norma era la esposa del empresario que construyó este salón en la avenida que sirve de frontera entre las barriadas de Luyanó y Lawton. Los elementos musicales presentes en la decoración sugieren que el nombre viene por la famosa ópera, cuyo papel principal, dicen, es uno de los más difíciles para soprano de coloratura.

La cronología La Tienda Negra, de la Cinemateca de Cuba, en la fecha del 7 de mayo de 1910, registra este dato: “El salón Norma, inaugurado recientemente, se anuncia como el único con butacas de caoba y piso con desnivel”.

Según el Anuario Cinematográfico y Radial Cubano de 1959, el cine Norma tenía 820 asientos. Desde hace bastante tiempo pasó a ser almacén. Es una de las fachadas de cine parcialmente conservadas más antiguas que existen en La Habana.
Imagen: Cine Norma.Calzada de Luyanó.La Habana.Mayo 2008. Foto: Autor

lunes, 7 de abril de 2008

ARTEHABANA EN LUGAR DE TRAJES PARA HOMBRES

Por: Lázaro Sarmiento


Novedades masculinas. J Vallés. San Rafael e Industria, en el corazón comercial de La Habana. Figuraba entre las tiendas más conocidas de Cuba. El establecimiento tiene en la actualidad una función muy distinta de la que ofrecía cuando fue intervenido por el Gobierno Revolucionario en la década del 60 del pasado siglo. Ahora es Artehabana, plaza cultural.


Su esplendor de hoy se debe a las inversiones que recibió durante la remodelación del bulevar de San Rafael en el año 2004. El resto fue imaginación y buen diseño. La famosa tienda de ropa y sastre a la medida, que había languidecido durante el Período Especial, pasó a ser un centro de promoción cultural.

Aquí se pueden adquirir discos, equipos de audio, instrumentos musicales ,pinturas ,artesanía y libros. Las instalaciones sirven de escenario a conversatorios y peñas, así como a la presentación de trovadores, solistas y grupos musicales de pequeño formato. Artehabana ha logrado mantener una programación artística estable y conquistar al caluroso público de las tardes habaneras.

El antiguo edificio de los Almacenes J. Vallés y Compañía, fundada en 1876, ha corrido mejor suerte que otros inmuebles del bulevar de San Rafael, como el hotel Bristol, los cines Duplex y Rex y la tienda por departamento Fin de Siglo. El propietario principal de esta última, el médico Amado Gabriel Lavín, era también el dueño de J. Vallés. Poseía, además, la conocida embotelladora de agua mineral marca Copey.

Artehabana constituye una muestra del moderno brillo y la renovada función social que pueden adquirir determinados edificios que perdieron su original realce. El Duplex y el Rex merecen un destino similar al de los trajes masculinos a la medi
ecoestadistica.com